En Medialogom, estamos comprometidos con la calidad y la excelencia en cada etapa del proceso de producción de nuestro ajo. Desde la selección de las mejores semillas hasta el cuidado de cada bulbo en su proceso de crecimiento y cosecha, cada paso se realiza con el máximo cuidado y atención al detalle. En este artículo, te invitamos a conocer de cerca nuestro proceso de producción y los secretos que hacen de nuestro ajo un producto excepcional.
Selección de las Semillas: El proceso de producción comienza con la selección de las mejores semillas, provenientes de cultivos anteriores que han demostrado su alta calidad y productividad. Buscamos variedades que se adapten bien a las condiciones climáticas y del suelo de nuestras regiones productoras, así como semillas que garanticen un sabor intenso y característico. La calidad de la semilla es el primer paso para obtener un ajo de excelencia.
Siembra y Cuidado del Cultivo: La siembra se realiza en los meses de otoño e invierno, dependiendo de la región. Preparamos el suelo cuidadosamente, asegurando una buena fertilización y un drenaje adecuado. Durante el proceso de crecimiento, nuestros agricultores monitorean de cerca cada cultivo, realizando riegos controlados, fertilizaciones orgánicas y eliminando las malas hierbas. Nos preocupamos por mantener un equilibrio en el ecosistema para evitar el uso de pesticidas y herbicidas.
Cosecha y Selección: La cosecha se realiza en los meses de primavera y verano, cuando el ajo ha alcanzado su madurez óptima. La cosecha se hace de forma manual, seleccionando cuidadosamente cada bulbo para asegurar que cumpla con nuestros estrictos estándares de calidad. Se desechan los bulbos dañados o deformados, dejando solo los de mayor calidad para el proceso de envasado.
Proceso de Curado: Una vez cosechado, el ajo pasa por un proceso de curado para eliminar el exceso de humedad y prolongar su vida útil. El ajo se deja secar al aire libre, bajo sombra, durante varias semanas, hasta que alcanza el punto óptimo de deshidratación. Este proceso es fundamental para mantener la calidad y el sabor característico del ajo.
Envasado y Distribución: Después del curado, el ajo se clasifica por tamaño y se envasa cuidadosamente en diferentes presentaciones, dependiendo de las necesidades de nuestros clientes. Utilizamos materiales de embalaje que protegen el ajo de la humedad y la luz, asegurando su frescura durante todo el proceso de transporte y almacenamiento. Nuestro equipo de logística se encarga de que el ajo llegue a su destino en óptimas condiciones, manteniendo intactas todas sus propiedades.
Trazabilidad y Transparencia: En Medialogom, nos comprometemos con la trazabilidad y la transparencia en cada etapa de nuestro proceso de producción. Trabajamos directamente con nuestros agricultores, y tenemos un registro detallado de cada lote de ajo, desde la semilla hasta el punto de venta. Queremos que nuestros clientes sepan exactamente de dónde viene nuestro ajo, y que puedan confiar en su calidad y frescura.
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